SIGNIFICADO DEL NOMBRE GENEALOGICO ANCESTRAL DE TU NOMBRE.
SIMON, SHIMON, SIMEON, SIMION, SIM, SIMONA, SIMONETE.
♦ ETIMOLOGÍA.
♦ Dios ha concedido.
♦ Dios ha escuchado.
¿Cuál es entonces esta plegaria inconsciente? Forzosamente es en relación con una demanda que no había sido escuchada por los familiares. De golpe, Simón estará dentro de la trayectoria de una insatisfacción permanente o en otro sentido, al servicio permanente de sus familiares. Esta plegaria nos cuenta que hay mucha esperanza de ver su deseo cumplido. La desesperación inconsciente fluirá en el cuerpo de Simón.
La decepción de Simón será su mayor trayectoria. Será necesario ir a buscar detalladamente la petición de los fieles para comprender con precisión su proyecto sentido. Simón estará marcado por una voluntad muy grande. Es dentro de un entusiasmo incontrolable, una energía que lo pone en una trayectoria de chef, pero sin la sabiduría, ni la estabilidad. Sobre el plano simbólico, Simón ha traicionado la palabra de su padre. El ha deshonrado al padre. Se buscará entonces en la genealogía una falta sexual marcando ese deshonor, un hijo hecho fuera del matrimonio.
La cristalización del poder de Simón se hará a nivel de la laringe. En efecto, él impone el temor o estará invadido por el miedo femenino o que fluye en la garganta. La historia familiar estará igualmente marcada por una rivalidad fraternal pudiendo arrastrar una programación de cáncer de pulmón. La otra problemática es que nadie lo sigue en su paso y él se siente sólo.
Dentro de la tradición, Simeón es el segundo hijo, él sigue de Rubén el primogénito. Para Rubén, su madre se dirige a Dios en términos de “Dios mira mi desamparo” y para el segundo, de “al fin tú has oído”. Se trata aproximadamente, sobre el plano simbólico, de un desamparo que será transmitido en el resentir de los Simones, desamparo que podrá transformarse en profunda desesperación. Es con ese resentir que se buscarán los accidentes y las grandes contrariedades en la recámara nupcial.
La cristalización del poder de Simón se hará a nivel de la laringe. En efecto, él impone el temor o estará invadido por el miedo femenino o que fluye en la garganta. La historia familiar estará igualmente marcada por una rivalidad fraternal pudiendo arrastrar una programación de cáncer de pulmón. La otra problemática es que nadie lo sigue en su paso y él se siente sólo.
Dentro de la tradición, Simeón es el segundo hijo, él sigue de Rubén el primogénito. Para Rubén, su madre se dirige a Dios en términos de “Dios mira mi desamparo” y para el segundo, de “al fin tú has oído”. Se trata aproximadamente, sobre el plano simbólico, de un desamparo que será transmitido en el resentir de los Simones, desamparo que podrá transformarse en profunda desesperación. Es con ese resentir que se buscarán los accidentes y las grandes contrariedades en la recámara nupcial.
Simón busca constantemente el equilibrio de los contrarios. El estará constantemente en el deseo de armonizar la pareja paterna que frecuentemente no va bien. Es por la enseñanza o el sacrificio de si mismo que él descubrirá la paz. Dentro de la genealogía, se buscará el hijo que ha perdido el derecho de primogenitura, o la muerte del primer hijo. Simón se ve, en cuanto a él, como el primero. ¿No habría sido el preferido de su madre, él que ha sabido responder a su espera? Se buscarán las patologías ORL.